Fibrilación auricular – Arritmia
La fibrilación auricular es el problema de ritmo cardíaco o arritmia más común. Puede aparecer en pacientes que no tienen ningún otro problema en el corazón o en otros que sí tienen enfermedades cardiacas previas (valvulares, coronarias, miocardiopatías, etcétera.).
Este padecimiento lo pone en riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular (ictus),
un infarto y otros problemas.
En las personas que padecen fibrilación auricular, las señales eléctricas que controlan los latidos del corazón son anormales. Como resultado, las dos cámaras superiores del corazón (aurículas) dejan de bombear bien y la sangre que debería salir de esas cámaras queda rezagada y algo estancada.
A medida que la sangre se acumula, puede empezar a formar coágulos. Estos coágulos pueden viajar por los vasos sanguíneos hasta el cerebro, produciendo una embolia que causa accidentes cerebro-vasculares (ictus). En algunas personas, la fibrilación auricular nunca desaparece. En otras, va y viene.
Si ha tenido una o más fibrilaciones auriculares pero ahora tiene un ritmo cardíaco normal, pregúntele a su médico qué puede hacer para prevenir una nueva. Si su médico sospecha que tiene una fibrilación auricular, probablemente le hará una prueba llamada electrocardiograma, también se conoce como ECG.
El electrocardiograma permite registrar la actividad eléctrica del corazón. Otras exploraciones permiten descartar la existencia de patología cardiaca
Síntomas de la Fibrilación Auricular
Algunas personas no tienen ninguna molestia. Cuando aparecen síntomas, pueden
ser los siguientes:
- Sensación de que el corazón se acelera, que existen fallos en los latidos o late fuera de sincronía.
- Opresión o dolor leve en el pecho.
- Mareos o sensación de desvanecimiento.
- Problemas para respirar, especialmente con el ejercicio.
Prevención
Algunas personas pueden reducir sus posibilidades de tener fibrilación auricular nuevamente si:
- Controlan su presión arterial.
- No toman mucho alcohol (se limitan a 1 o 2 bebidas al día).
- Reducen el consumo excesivo de cafeína.
- Si es necesario, controlan su patología tiroidea.
- Hacen ejercicio regularmente, pero no en exceso.
- Bajan de peso (si tienen sobrepeso).
Tratamiento
El tratamiento puede incluir uno o más de los siguientes elementos:
- Medicinas para controlar la velocidad o el ritmo del latido cardíaco
- Medicinas para evitar que se formen coágulos dentro del corazón y que puedan producirse embolias. Su médico le indicará si necesita anticoagulación, pues en algunos casos de muy bajo riesgo no es necesaria.
- Un tratamiento llamado “cardioversión” que consiste en aplicar una corriente eléctrica leve al corazón para corregir su ritmo
- Tratamientos llamados “ablación” en los que se usa calor (“ablación por catéter de radiofrecuencia”) o frío (“crioablación”) para destruir la pequeña parte del corazón que envía señales eléctricas anormales.
- Un dispositivo llamado marcapasos que se implanta en el cuerpo y manda señales eléctricas al corazón para controlar el latido cardíaco. Suele utilizarse cuando el corazón tiene tendencia también a ponerse lento, lo que se denomina síndrome bradicardia-taquicardia.
¿Cómo será mi vida?
Muchas personas con fibrilación auricular llevan una vida normal. No obstante, es importante que tome las medicinas recetadas por su médico todos los días.
Tomar las medicinas según las indicaciones del médico puede reducir la posibilidad de que su fibrilación auricular cause un accidente cerebrovascular (ictus).
También es conveniente aprender cuáles son las señales y los síntomas de un accidente cerebrovascular (ictus).